Este domingo 13 de Octubre de 2024 fue un antes y un después para la localidad de Arocena, convirtiéndose en el epicentro de la cultura y la tradición Santafesina a través de la celebración de la primera edición de la Fiesta del Alfajor «Arocense», un evento que congregó a más de 6.000 personas con entrada libre y gratuita. Este acontecimiento no solo fue un hito significativo para la localidad, sino que también marcó un precedente en toda la provincia de Santa Fe, demostrando la capacidad de una pequeña comunidad para realizar un evento de gran magnitud.
La organización de este festival fue fruto de años de imaginarlo. Durante tres meses, un equipo comprometido se encargó de diseñar y estructurar cada detalle fundamental, desde la ubicación del escenario principal hasta la creación de espacios para la gastronomía, los artesanos y los emprendedores locales, regionales y provinciales que llegaron a la plaza General José de San Martín. Tal nivel de preparación requirió no solo una logística bien definida, sino también una mano de obra altamente calificada que garantizara el éxito del evento.
Durante la festividad, el presidente de Arocena, Osvaldo Lombardi, expresó su satisfacción por la realización del evento, considerando que es un merecido reconocimiento para la familia Acerbi y para toda la fábrica de alfajores que han contribuido a la identidad de la localidad, dando empleo a muchas familiar de la localidad y expresando que, en su juventud, el mismo trabajó en la empresa Arocense.
Franco Rivas, Secretario de Cultura, Turismo y Deportes, destacó la importancia de Arocena como parte del corredor turístico de la Ruta Provincial 11, subrayando las oportunidades que el pueblo ofrece a turistas y visitantes. Esta fiesta no solo celebra el alfajor, un símbolo de la cultura gastronómica local, sino que también busca posicionar a Arocena en el mapa turístico de la provincia. Sin olvidar el ADN cultural y turístico que tenemos y desde hoy lo damos a conocer.
Además, el espectáculo ofreció un escenario imponente donde se destacaron diversas voces provinciales, regionales y locales, enriqueciendo la oferta musical de la jornada, tales como María Emilia Sottocorno, Las Dos María, Valentín Avila, Compañía de Tango (Patricia y Antonio), Gonzalo Villarino, Gastón Velázquez, Danzas Folclóricas del Liceo Municipal de Sauce Viejo, Grupo «Entre Lunas», Grupo «La Mentirosa», Encuentro Dúo, Zamba «La Tribu», Academia de Taekwondo «Arionda», Nico «El Payador», Agustine.
Un momento emblemático de la fiesta fue la designación de Orlando Vera Cruz como padrino del evento y la elección de las primeras Representantes Culturales, Guillermina Delgado de Monje y Ailén Álvarez de Coronda, quienes tendrán la responsabilidad de representar a la festividad a lo largo del año. Este acto simboliza el compromiso de la comunidad con la promoción y conservación de sus tradiciones.
Finalmente, el equipo organizador expresó su orgullo por haber podido llevar a cabo este acontecimiento, manteniendo la esperanza de que futuras ediciones sean aún más exitosas. La Fiesta del Alfajor «Arocense» se establece, como un nuevo referente cultural en la provincia, amalgamando tradición y modernidad en un evento imborrable para todos los que vivieron en primera persona la fiesta.
Alfajores AROCENSE
En la esquina del Boulevard Ledesma y Santa Virginia se emplaza una empresa familiar de más de seis décadas de historia. Allí funciona desde 1957 la fábrica de alfajores santafesinos “Arocense”, actualmente y de manera diaria cocinan y arman cientos de decenas de alfajores hechos por trabajadores de aquel pueblo santafesino.
Lo que primero supo ser una panadería luego se transformó en la ya clásica esquina que ofrece los tradicionales alfajores santafesinos. “No hay una fecha exacta, pero familiarmente comenzaron a realizar alfajores. En ese momento trabajaban muchas más personas, siempre con gente del pueblo” destacó Laura Gervassoni.
Pablo Acerbi y su esposa fueron los fundadores de esta empresa familiar que sostiene desde hace más de sesenta años una receta de alfajor bien santafesino. “Desde que éramos chiquititos estábamos todos acá, ahora contamos con un horno a gas, pero en sus principios era a leña. Recuerdo que yo particularmente dormía al lado del horno, en un canasto, hasta ir a la escuela”.
Anécdotas que llenan de historia, una pequeña fábrica de alfajores que desde sus inicios y hasta fines de 1980, solo realizaba alfajores santafesinos de dulce de leche. “A partir de 1980 se sumaron otras variedades que las sostenemos hasta hoy en día, pero siempre en formato de alfajor santafesino tradicional”.
